Era todo un acontecimiento que después de tanto tiempo que Waldo regresara a Buenos Aires y además para dar un concierto. Y nada menos que en el Lunapark, fue en 1972.
Las calles estaban empapeladas con los posters que anunciaban el concierto de Waldo con la publicidad de Microfón
Fue un éxito arrollador, la gente en Buenos Aires estaba expectante por ese concierto, se habían vendido todas las entradas, tanto es así que se pensó en hacer más funciones pero finalmente no se hizo
Los días previos, Waldo aprovechaba, entre sus ensayos, a visitar algunos programas para hacer promoción aunque realmente no la necesitaba, se encontraba con amigos y familiares, hubo una reunión en casa de Marta su madre y allí había muchísima gente que le brindaba su cariño y admiración.
Isabel no tenía muy buena relación con su suegra, pero por Waldo iba a esas reuniones familiares y apoyaba a Waldo.
Waldo tuvo algunos ensayos en casa de su madre con quien iba a ser la cantante de algunos de sus temasde opera: Rukmini Sukawati (ambos tenían muy buena relación)
Ella se estaba quedando en el Hotel Sheraton de Buenos Aires al igual que Isabel y algunos familiares como el hermano de esta (Miguel Luis Pisano Colistro) que hacía las veces de su custodia.
Waldo ensayó varias veces con la orquesta antes del concierto lo que llamaba la atención de su trabajo en esos ensayos era su increíble oído musical, se daba cuenta perfectamente de la nota del instrumento que había desafinado. Y lo decía, claro.
El concierto fue todo un éxito, tanto de público como en las piezas que se escucharon esa noche.
Waldo hizo una pequeña introducción explicándolo todo y luego todo fueron ovaciones, el público en pie emocionado aplaudía a rabiar
Waldo no podía con sus trajes, que luego de los conciertos terminaban mojados de tanto sudar, pero estaba muy contento con el resultado, también por supuesto su madre y su mujer
Luego del concierto hubo una cena en un restaurante de la capital con unas cuantas personas de la familia y amigos en un ambiente de alegría y festejo.
A poco de ello, Waldo e Isabel regresaron a España, a su casa, a la normalidad